Salud Mental

Datos psicométricos del EMBU-I “Mis memorias de crianza” como indicador de la percepción de crianza en una muestra de adolescentes de la Ciudad de México

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María Elena Márquez-Caraveo
Laura Hernández-Guzmán
Javier Aguilar Villalobos
Verónica Pérez-Barrón
Marina Reyes-Sandoval

Resumen

Introducción: La crianza se define como la responsabilidad asumida por los padres respecto al crecimiento físico y desarrollo emocional y social de un hijo. Existen datos científicos sólidos que sugieren que los ambientes de crianza ejercen efectos importantes sobre una variedad de desenlaces, que incluyen desde variaciones en el contexto del funcionamiento adaptativo, el desarrollo psicológico saludable y el éxito en la escuela, hasta desenlaces psicopatológicos como el uso y abuso de drogas, el comportamiento agresivo y problemas de ansiedad en niños y adolescentes. La adolescencia implica la transformación de las relaciones padre-hijo que caracterizaron a la niñez. Es por ello que la adolescencia, como transición crítica que entraña demandas sociales emergentes, es de por sí un periodo del ciclo vital de especial vulnerabilidad. Aunado a estos cambios, durante la adolescencia el desajuste psicológico constituye una amenaza seria a la salud psicológica de la persona a mediano y largo plazos. Se sugiere que el conflicto, la falta de cohesión, la distancia emocional y el rechazo se relacionan con el uso y abuso de alcohol y drogas y conductas de riesgo tales como violencia y embarazo temprano en los adolescentes. De ahí la necesidad de contar con instrumentos que midan la percepción adolescente de la crianza que predice mejor el funcionamiento ulterior. El EMBU-I es un instrumento desarrollado inicialmente en Europa, adaptado y evaluado psicométricamente en más de 25 países, cuya validez, confiabilidad y ventaja transcultural se han establecido plenamente. La crítica respecto a que informa retrospectivamente de la crianza en los adultos ha sido subsanada por las investigaciones que evalúan la percepción actual en sujetos jóvenes, niños y adolescentes. Por todas las razones mencionadas, el propósito de este estudio fue aportar datos de este instrumento respecto a la consistencia interna y congruencia de sus dimensiones, así como de la validez de tipo convergente y divergente de sus escalas (dado que el instrumento tiene escalas que miden cosas distintas), para lo cual se utilizaron las escalas del FES (Family Environment Scale) que resultaron con coeficientes alfa de Cronbach superiores a .50, como la cohesión, la organización y el conflicto, así como el Cuestionario de Interés de los Padres en los Estudios. Método: En el estudio participaron 775 estudiantes de secundaria. Los instrumentos utilizados fueron el EMBU-I, las escalas de cohesión, organización y conflicto y de interés parental en los estudios. Resultados: Los resultados confirmaron valores alfa de Cronbach superiores a .65 para tres de las escalas (calidez, rechazo y control) con excepción de la de favoritismo, en congruencia con lo reportado en otras investigaciones. De este modo se obtuvieron altas correlaciones entre las escalas de padre y madre en cada dimensión, lo que sugiere que los perfiles emocionales de ambos padres son similares. Como se esperaría, se observaron correlaciones negativas entre la calidez y el rechazo en ambos padres. Cabe destacar que en el caso del padre el control se correlaciona con la calidez, en tanto que en el caso de la madre se percibe una carga mayor de rechazo que de calidez. Estos resultados coinciden con lo reportado en la bibliografía respecto a la percepción del padre con un mayor grado de deferencia que la madre. La correlación de calidez en ambos padres con cohesión y organización familiar apoya la validez convergente y en el mismo sentido se observa la correlación entre conflicto y rechazo. En apoyo a la validación divergente y en congruencia con los datos de la validación convergente, se observaron las correlaciones negativas entre rechazo en ambos padres y las escalas de cohesión y organización, así como las correlaciones de calidez (para padre y madre) con conflicto. En síntesis, este estudio aportó datos respecto a la consistencia interna y la congruencia de las dimensiones de calidez, rechazo y control del EMBU-I. La validez convergente se propuso a partir de las correlaciones positivas de calidez con cohesión, organización e interés de los padres, y de rechazo con conflicto. Las correlaciones negativas de calidez con conflicto y de rechazo con cohesión, organización e interés de los padres apoyaron su validez divergente.
Palabras clave:
Crianza, percepción adolescente, EMBU-I, validez, confiabilidad