Bases teóricas de las psicoterapias cognoscitivo-conductuales

Resumen

El presente ensayo revisa los fundamentos teóricos, tanto filosóficos y psicopatológicos como terapéuticos, de las psicoterapias cognoscitivo-conductuales. En el primer dominio llamado constructivista radical, se plantea que la realidad es construida, no descubierta, por los seres humanos, y que esta construcción sigue reglas y métodos limitados solo por el componente biológico. Se sostiene que ya que podemos inferir en buena medida las operaciones, por medio de las cuales organizamos el mundo de nuestra experiencia, será la conciencia de esta acción, la que podrá auxiliarnos en el logro de una mayor adecuación tanto cognoscitiva como conductual. En el segundo, se considera que la presencia de psicopatología se debe, fundamentalmente, a una distorsión en el procesamiento de la información procedente, tanto del interior como del exterior del individuo; así, se postula que es la forma en la que el individuo interpreta la realidad, más que la realidad misma, la que produce los diferentes estados emocionales y, por último, la conducta misma. Esta forma de interpretación de la realidad, a pesar de ser altamente idiosincrásica, sigue reglas de abstracción que pueden ser entendidas de manera muy precisa, con el auxilio de la psicología cognoscitiva y de las demás ciencias que componen el movimiento contemporáneo que se denomina Ciencia Cognoscitiva. Finalmente, en el dominio de la terapéutica, todos los procedimientos metodológicos y pragmáticos que forman las diferentes escuelas psicoterápicas, mismas que comparten en mayor o menor medida, el fundamento básico para la comprensión de la psicopatología; están encaminadas, por una parte, a al corrección de las distorsiones cognoscitivas y, por otra, a la modificación de los patrones de conducta pública y privada de los pacientes. Lo anterior resulta en enfoques de tratamiento que parecen estar: unos, más inclinados al enfoque conductual tradicional, otros que parecen estarlo hacia el planteamiento clásico cognoscitivo y, otros más, hacia los que se apegan con más rigor a la Ciencia Cognoscitiva, forman el enfoque neo-clásico dentro de las psicoterapias cognoscitivo-conductuales. Todos y cada uno de estos enfoques psicoterapéuticos han sido utilizados con éxito en una gran variedad de trastornos psiquiátricos. La tarea del psicoterapeuta con este enfoque, es la de aquél que diagnostica y evalúa los procesos de información mal adaptados y, de manera subsecuente, diseña experiencias de aprendizaje que alterarán las cogniciones inadecuadas y los procesos afectivos y conductuales con los que estén correlacionados e interactuando.