Complicaciones de la asfixia perinatal en el recién nacido
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Resumen
A pesar de los avances en el cuidado perinatal que han tenido como consecuencia una disminución de la morbilidad y la mortalidad del recién nacido, la incidencia de parálisis cerebral y de retraso mental no ha disminuido). En general, el factor de riesgo más frecuente es la asfixia perinatal que en la India por ejemplo, es causa de alrededor de 20% de las muertes perinatales. Se trata por lo tanto de una entidad patológica muy frecuente en los países en vías de desarrollo. Nagdyman y cols. (18) afirman que aproximadamente un tercio de los recién nacidos con asfixia presentan encefalopatía hipóxico-isquémica. El electroencefalograma (EEG) es de gran utilidad en el estudio de los recién nacidos con asfixia. Hay una alta correlación entre la depresión de la actividad EEG y el deterioro neurológico de los niños. La mayor parte de los autores, le conceden un valor predictivo al EEG. Van Lieshou y cols. enfatizan la correlación existente entre el EEG y la evolución clínica, aun en la predicción de secuelas menores. La leucomalacia periventricular puede detectarse mediante EEGs seriados, realizados inmediatamente después del nacimiento de los niños. Este estudio tiene dos objetivos: 1) dar a conocer las complicaciones de tipo neurológico que encontramos en un grupo de niños recién nacidos, con factores de riesgo de daño cerebral, que fueron evaluados en nuestro laboratorio, y 2) la descripción de los hallazgos tomográficos en una serie de casos con hipodensidades generalizadas, que, en nuestro conocimiento, sólo habían sido descritas en sujetos con antecedentes de paro cardíaco. Se estudió a 34 recién nacidos, procedentes del Hospital Materno-Infantil y del Hospital General de la Ciudad de Querétaro, y todos ellos presentaron factores de riesgo de daño cerebral, en particular asfixias perinatales de moderadas a muy severas (25 casos), sufrimiento fetal, prematuridad, malformaciones. A 22 niños se les realizó Tomografía Computada (TC) y a 3 de ellos, posteriormente, también Imagen por Resonancia Magnética (IRM); a 14 se les practicó ultrasonido (US) y doppler transfontanelar. Se les práctico EEG a 23 del total de estos niños y, en 16, se realizaron EEGs evolutivos. En 7 niños se observó en la TC que había hipodensidades importantes en la sustancia gris cortical, involucrando en todos los casos la sustancia blanca cortical. En estos niños, solamente el tálamo, los ganglios basales y las estructuras de la fosa posterior presentaban densidad normal, el resto era hipodenso. Estos casos iban acompañados de severas alteraciones del EEG, como actividad lenta focal y actividad paroxística multifocal. Hubo 6 casos con leucoencefalomalacia periventricular, de los cuales dos presentaban además, otra patología: uno, un infarto cerebral y una hemiatrofia cerebelosa y el otro un infarto cerebral extenso. Los 6 niños con leucoencefalomalacia tenían antecedentes severos de asfixia. Se observó además aumento del volumen de los ventrículos laterales en estos niños y en otros en los cuales existían también alteraciones electroencefalográficas. El US transfontanelar demostró un aumento de la cisura interhemisférica en varios niños, concomitante con anormalidades del EEG. Se concluye que en el grupo de niños estudiado, que presentó hipoxia perinatal severa, se observaron complicaciones de tipo neurológico acompañadas de alteraciones estructurales del cerebro, que podían ser muy graves, y de anormalidades electroencefalográficas que perduraron durante varios meses, lo cual indica la importancia de su prevención y de la detección temprana del daño en el niño, con el objetivo de iniciar un tratamiento neurohabilitatorio intensivo y tratar de evitar al máximo las secuelas.
Palabras clave:
recién nacidos, daño cerebral, tomografía computarizada, ultrasonido, EEG, electroencefalograma